Hacer la Memoria Anual supone una carga de trabajo adicional para las entidades, a veces difícil de compaginar con las tareas en marcha. Con frecuencia, se convierte en un quebradero de cabeza.
Sin embargo, en punto&coma pensamos que tiene un valor añadido importante si se aborda no sólo como la necesaria rendición de cuentas de las actividades y la gestión de una entidad, sino también como una carta de presentación que muestra quién es, qué hace, cómo trabaja… su esencia.
Para que una Memoria Anual aporte ese valor añadido, conviene trabajar textos y diseño de manera conjunta, para lograr un documento bien estructurado, atractivo y de fácil consulta.
Os dejamos como ejemplo dos memorias que hicimos el año pasado:
La de Justicia Alimentaria, que realizamos desde hace años por lo que la estructura y el estilo ya están definidos y nos centramos sobre todo en los textos y el diseño.
La de Economistas Sin Fronteras, que hicimos primera vez. Empezamos proponiendo un estilo y una estructura que dieran respuesta a las necesidades de una organización que realiza un gran número de actividades a lo largo del año. Una vez acordados, trabajamos en detalle los textos y el diseño.
Hay tantos estilos de memoria como entidades.