La arquitectura bioclimática se define como aquella que en su diseño tiene en cuenta las condiciones climáticas del entorno en el que se ubica (soleamiento, sombras, vegetación, humedad, temperatura, vientos..) buscando aprovechar los recursos naturales disponibles para reducir al máximo los consumos de energía en la búsqueda del confort interior. La rehabilitación bioclimática busca incorporar este diseño en edificios existentes.

Un edificio tiene, entre otras, la función de protegernos en su interior frente a las condiciones ambientales exteriores que pueden resultar adversas. En muchos casos, la aparente disponibilidad inagotable de energía para regular la sensación de confort en las viviendas ha llevado a construir casas ineficientes. Viviendas que no tienen en cuanta los factores climáticos de la zona en la que se encuentran, lo cual puede hacer que en verano sean excesivamente calurosas y en invierno muy frías, a no ser que haya un aporte importante de calefacción o refrigeración. Actualmente, conseguir un confort adecuado en este tipo de edificaciones a base de calefacción o aire acondicionado, con los precios cada vez más elevados de la energía, es insostenible a largo plazo, tanto por el coste energético como por el impacto ambiental que supone.

Además del coste económico, esto supone un coste ambiental que a día de hoy no es posible asumir. Las necesidades energéticas actuales tienen un impacto importante en las emisiones de gases efecto invernadero.

La rehabilitación bioclimática busca revertir esas situaciones de elevada demanda energética, incorporando elementos que atenuen y reduzcan esa demanda, y ayuden a regular el confort en el interior de la vivienda.

Más información en: https://rebive.com/la-importancia-de-la-rehabilitacion-bioclimatica/